Cada vez lo vemos más claro, porque mira que ya la sospecha se planteaba desde el minuto cero, pero conforme avanzamos en este culebrón, la sombra de la carpa circense de la política complacentista se cierne sobre el terreno de juego.
La noticia:
20140214 tratan-eibar-tenga-hacer (+ 2 anexos)
El comentario:
Me parece bien que la S.D. Eibar se mueva para defender lo que les interesa; me parece bien que para ello, se sirva solicitar apoyos políticos, supongo que con el argumento de que, de alguna manera, el devenir del equipo pueda repercutir en un bien para la ciudad (un bien socioeconómico común, y no uno moral que dependerá más bien de si se es o no aficionado); me parece, de hecho, que los argumentos que defienden con relación a su gestión económica son razonables. Sin embargo tengo que puntualizar en un par de aspectos:
En primer lugar, que no me parece que el “compromiso” que las administraciones públicas tengan que tomar deba ser económico. Es decir, creo que poner dinero público para la consecución del capital necesario supondría un acto de malversación, al mismo tiempo que resultaría en la aceptación de las bases objeto de crítica por parte del Eibar… una contradicción, vaya. Si se aceptan las mismas, el dinero deberían ponerlo los socios y aficionados particulares, o –cosa que no sería muy recomendable pero que seguro que se lo habrán planteado –el Eibar tendría que pedir un crédito, de modo que daría al traste con su política previa.
Por otra parte, considero que algunos partidos políticos andan haciendo campaña con esto. Esta semana pasada, en twitter y facebook, han pululado mensajes a diestro y al otro diestro, recalcando lo que unos y otros se estaban movilizando a favor del Eibar. Por supuesto, cada uno sólo mencionaba lo suyo. Al final, cuando hay una petición justa, todos se mueven (como es el caso); pero a alguno ya le ha empezado a perder la boca y quiere prometer el Olimpo.
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