Una bandera que nos representa

Una pequeña nota en la mirilla para dar a conocer que el consistorio había procedido a la colocación de las cuatro banderas oficiales (Eibar, Euskadi, España y Europa) en su balconada. Un paso atrás para unos, una imposición para otros y un gasto para quien no quiere ver más allá de su chalé en Neguri... el tema de las banderas es, al final, una forma de confundir y enfrentar a unos ciudadanos que por lo demás tienen otras muchas cosas, más importantes, sobre las que pensar y protestar.

La noticia: 20120417 mirilla-201204170840
El comentario: "Ayer hablaban sobre este tema en la radio los 4 representantes políticos de PP, PNV, PSE y Bildu, de Eibar. Al margen de la opinión de la edil del PP (coherente, pero contraria a mi postura, y en cualquier caso afín a la imposición judicial establecida) y la del PNV (en su tónica, ambigua, interesada, populista…), me quedo con las opiniones vertidas por Eneko Andueza, del PSE, y de Igor Aldalur, de Bildu, que, entre otras cosas, dijeron, el primero, que la única bandera que por él pondría en el Ayuntamiento, sería la de Eibar (con lo que estoy totalmente de acuerdo), y, el segundo, que efectivamente la bandera española ha sido impuesta contra la voluntad de parte de la sociedad eibarresa, que la encuentra ofensiva (en este caso, en contra de lo que decía Andueza, de que a la gente en realidad no le importaba el tema de las banderas). Efectivamente, le haré esa concesión al edil del PSE, a la gente en realidad ese tema puede parecerle supérfluo (comenzando con el tema del paro, hay cosas más importantes a las que dedicarle el sueño diário). Pero también es verdad que la imposición de la colocación de unas banderas sí y otras no, puede resultar en sentimientos de conflicto. Habrá quien, viendo la Ikurriña se sienta satisfecho y le ofenda la bandera española; otros considerarán que estando la primera, le parece ofensivo la ausencia de la segunda; otros pondrían la bandera republicana; y otros un cartel de “compro oro”. Sea como fuere, lo más acertado para evitar conflictos, en esta ocasión, creo que sería colocar sólo la bandera de la ciudad, que es la única que nos une, ya que eso es lo que los políticos deben hacer: facilitar la convivencia de todos los eibarreses".

Actualización:
Otro lector comentaba en respuesta a lo anteriormente expuesto:
"Todo lo que dices se simplifica con un hecho: existe una imposición para poner la ensaña nacional. Y el partido al que tu siempre llamas ambiguo y malpones de todas todas, puso una placa en la Diputación constatando este hecho. Otros, por contra, ponen en el Ayt de San Sebastián la bandera española republicana y dicen que son más abertzales que nadie".

A esto, mi respuesta fue la siguiente:
"

Nunca llueve a gusto de todos, Txintxu. Es evidente que ningún partido político se libra de actuar de forma incoherente una o varias veces a lo largo de su historia. Yo procuro no hacer criba en ese sentido, tengo críticas para todos (puedes comprobarlo en los comentarios que he realizado anteriormente, disponibles también en el blog). A veces buenas y a veces malas.

Es cierto que para el PNV es posible que rara vez me haya surgido una valoración favorable, pues su funcionamiento, considero, se basa en elaboradas estrategias de marketing, más que en un posicionamiento sincero. Me parece que cuando promocionan alguna de sus acciones en prensa, éstas tienen un carácter popular, amable, aparentemente integrador… que no está mal, ¡ojo! Todo lo que hagan que favorezca al comun de los ciudadanos, es bien venido. El problema está con lo que hacen en los ámbitos donde DE VERDAD deciden la política de nuestro país o nuestras ciudades. Con frecuencia esta otra cara sólo es visible acudiendo a fuentes ajenas a la prensa común, aunque públicas, que la mayoría de la gente no se molesta en mirar: boletines oficiales, diarios de sesiones parlamentarias…

Recordemos que el PNV facilitó la investidura de Aznar (voto a favor) o la reforma laboral de 2010 (abstención), por poner unos ejemplos que probablemente contrasten con la opinión de la mayoría obrera del país. Igualmente, en gipuzkoa declaró que su concepción de lo que significa la “participación ciudadana” se limita a una especie de ampliación de la información aportada a la ciudadanía (véase http://bigkerman.blogspot.com/2012/03/deporte-municipal.html) … cositas que te vas encontrando por ahí y que te hacen pensar.

Respecto a lo de la bandera, parece que la colocación de la bandera de la república española supone una contradicción con la postura independentista de Euskal Herria. Probablemente otro gallo cantaría en el ámbito de las relaciones fraternales entre vascos y españoles si el concepto nacional de éste último no fuera el presente, herencia de la dictadura franquista que conminó al desprecio por parte de no pocos ciudadanos españoles a todo lo que significa o está relacionado remotamente con lo vasco, lo que ha ido heredándose hasta nuestros días gracias al ideário “conservador” y a la falta de pensamiento crítico. En su día bandos republicanos y vascos lucharon codo con codo en la guerra civil española. Por ese motivo, no sé si en el ayuntamiento de San Sebastián se ha hecho por esto mismo, considero acertado reivindicar el día de la República con bandera y todo.

Por último, decir que generalmente me ciño a Eibar en mis comentarios, utilizando información externa sólo con el propósito de explicar cuestiones relacionadas con las locales. Muchas veces los grupos políticos locales tienden a depender demasiado del seguimiento de un ideário común de sus estamentos superiores (“el partido”), lo que acaba por perjudicar la convivencia política local y, por ende, a la ciudadanía eibarresa. Y de ese error sí que no se libra ninguno de los grupos de Eibar."