jueves, 19 de julio de 2012

Con sumo gusto

Recientemente hablábamos de valores ( http://bigkerman.blogspot.com/2012/07/valorando.html ) y de cómo la educación debería ser la clave para lograr una sociedad más sostenible, fundamentada en la implicación. En realidad, esto se puede aplicar (ya lo recalcábamos) al ámbito empresarial (y probablemente a otros muchos) y, dentro de éste, al comercial y a los hábitos de consumo.
Hoy los periódicos nos mostraban dos noticias relacionadas con ello. Por un lado, en 20120719 oportunidades-feria-verano (y sus adjuntos) se hablaba acerca de la Feria de las Oportunidades que se está llevando a cabo en Toribio Etxeberria durante estos días. Por otro, en 20120719 huerta-internet se daba a conocer la web a través de la que vamos a poder conocer y comprar los productos de los baserritarras de la comarca.
En la etapa de crisis que nos ha tocado vivir, como muchos antes han anotado, debemos replantearnos los valores que nos pueden ayudar a salir de la misma. Y en torno a ello, considero, estas dos noticias pueden ayudarnos a observar y valorar algunas posibilidades:

En primer lugar, veamos algunos comentarios de la primera noticia, relacionada con el comercio eibarrés: “la gente no suele venir a por nada específico, el artículo más demandado es la ganga”, “suelo venir todos los años con mi mujer, y siempre picamos en algún capricho, aunque ella compra más que yo. Nunca suelo venir a por nada en concreto”, “me doy una vuelta para comprarme un capricho. Los precios siempre están mejor que en la temporada normal”.
Tres afirmaciones de tres personas diferentes, con el denominador común del CONSUMISMO. Es decir, la gente acude sin un plan concreto de compra que se dirija a la cobertura de verdaderas necesidades. Se trata de compras muchas veces superfluas, lo que significa que, quien actúa de esa manera debe tener cierto margen adquisitivo. Se puede contraponer con otra afirmación, en este caso por parte de una comerciante, que decía que “tanto en temporada como en outlet se gasta menos dinero”, dejando notar que, si bien algunas personas entrevistadas tienen esa perspectiva arriba plasmada, en general, la sociedad se ha empobrecido (sea porque el producto haya aumentado de precio, sea porque su salario promedio haya disminuido…). Y como decíamos en http://bigkerman.blogspot.com/2012/06/actuacion-local.html , quien puede dar la vuelta a la tortilla es quien aún disponga de margen de maniobra (y cuanto mayor sea, mejor, pero más responsable debe ser!). El consumismo es para quien tenga mucho mucho muuuucho margen. En ese sentido, la prudencia es una virtud, y siempre será más recomendable dirigir los esfuerzos (y la tela) a cosas más pensadas y socialmente justas. De ahí, saltamos a la segunda noticia, la de la web de los baserritarras. Una iniciativa CO-JO-NU-DA, que todos debieramos tener en cuenta (y el link en favoritos). Eso sí que impulsa la economía local, la eibarresa y la de la comarca. Porque prácticamente todo el producto es de fabricación propia (la salvedad serían los productos de control de plagas, sustratos,… que los caseros hubieran podido utilizar, pero el producto en sí… más local no puede ser). Eso significa, como ya decíamos en esa entrada referida, un ciclo económico cercano y riqueza social. Todos debemos protegerlo e impulsarlo, incluso si nos cuesta un poco más, y sobre todo si (y ya vemos que así es en muchos casos) podemos permitírnoslo.

En este sentido también, el primer artículo plasmaba de forma cruda y reveladora las palabras de una comerciante, que explicaba perfectamente la problemática implícita en la liberalización de los horarios comerciales: “el pequeño comercio no puede competir contra esas medidas. O vives 24 horas en una tienda, que eso en España no se hace, o te acostumbras a trabajar como en otros países. Supone contratar gente, lo cual supone un incremento insostenible en los costes. Tampoco podemos competir contra las grandes empresas que además reciben subvenciones por contratar a gente en situación de desempleo. Este contexto nos obliga a ser competentes en otros ámbitos. La verdad, si se lleva acabo la liberalización en Eibar será un grandísimo desastre”.

Es por eso que debemos asimilar la perspectiva crítica como valor de nuestra sociedad. Nuestros comerciantes y productores (baserritarras, pero también industrias, talleres, artesanos…) pueden salir a flote mediante la oferta de productos que sean exclusivos y de calidad, lo que se traduce en necesidad de I+D+i y en PRODUCTO LOCAL, sin tener por ello que realizar sacrificios inhumanos. Pero, igualmente, también los consumidores deben preocuparse por buscar y gastar su dinero (lo que constituye una INVERSIÓN) en ese mismo producto local, para que ninguno tenga que padecer las consecuencias de una sociedad cada vez más insostenible.

No hay comentarios:

Publicar un comentario